Las empresas que trasladan los productos químicos peligrosos deben mantener los vehículos en las mejores condiciones, según un comunicado de la oficina.
Un accidente de tráfico del pasado 1 de marzo en un túnel que une la ciudad de Jincheng, en la provincia septentrional china de Shanxi, y la ciudad de Jiyuan, en la región central de Henan, provocó 31 muertos, 12 heridos de gravedad. Nueve personas siguen desaparecidas.
Un camión cisterna cargado de metanol, un líquido tóxico e inflamable que se emplea como combustible, colisionó por detrás con otro vehículo similar. El metanol vertido del primero se incendió y las llamas se extendieron rápidamente en el túnel, quemando 42 vehículos.
Los gobiernos, departamentos y organismos locales deben examinar los túneles de carretera para prevenir peligros potenciales, añadió el documento