Bomberos activó el protocolo habitual para fuegos en naves industriales, con un dispositivo en el que participaron 55 efectivos

Un fuerte olor desagradable a productos químicos. Eso es lo que provocó la gran nube de humo que se levantó en la capital en la pasada noche del martes debido al incendio que se registró en una nave del polígono industrial de El Viso, que sin embargo no fue tóxica, según aseguró ayer el concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Málaga, Mario Cortés. Aun así, los elementos que había en el interior de la nave sí funcionaron como combustible para hacer que el fuego fuese más virulento.

«Hubo un momento en el que me quité el equipo de aire y no noté nada muy extraño», explica uno de los bomberos que participó en las tareas de extinción en la noche de los hechos: «Cuando es humo tóxico te entran picores en la garganta al respirar, algo que no pasó».

De hecho, aunque se trataba de una nave que contenía productos como disolventes, en ningún momento se llegó a activar un despliegue especial para combatir productos químicos. En cambio, desde el Cuerpo de Bomberos informaron de que sí activaron el protocolo de actuación para incendios que se registran en polígonos industriales, en los que en un primer desplazamiento se cuenta con 22 efectivos y con numerosos medios técnicos.

Pero al llegar al lugar de los hechos y observar la envergadura del incendio, el jefe que se encontraba de guardia decidió incrementar el dispositivo que se había desplegado. Por ello, se llegó a movilizar hasta a 55 efectivos, que son casi la totalidad de los que se encontraban trabajando esa noche en la capital malagueña.

En el interior de la nave había productos inflamables, lo que facilita una evolución rápida del fuego, siempre según explicaron las mismas fuentes. Así se alcanzaron temperaturas muy altas, que incluso llegaron a doblar vigas de acero, algo que sucede a partir de 600 grados.

Decretado sobre las 21.30 horas, los efectivos de Bomberos trabajaron sin descanso. A media noche se conseguía dar por controlado el fuego, pero no era el final de la intervención, ya que ésta continuó hasta las 19.00 horas de ayer, cuando finalmente se retiraron las dotaciones que había desplegadas en la zona.

El que las labores de refresco de la nave se extendiesen hasta la tarde de ayer hizo imposible que la investigación para esclarecer el origen de las llamas comenzase. Las fuentes consultadas explicaron que los agentes del Cuerpo Nacional de Policía que se encargan de las pesquisas se tuvieron que retirar del lugar de los hechos.

La nave afectada ha quedado completamente calcinada, por lo que previsiblemente tendrá que ser derribada. Durante la jornada de ayer también trabajaban en sus locales colindantes varios propietarios que se han visto afectados. «Me han dicho que la pared se puede caer de forma inminente, por lo que estamos intentando rescatar todo el material posible», indicaba uno de ellos.