Kuk medio Ambiente S.L., la empresa cuyas instalaciones del polígono Albolleque de Chiloeches llevan ardiendo desde la madrugada del pasado viernes, mezclaba residuos peligrosos procedentes de empresas farmacéuticas (agua con disolvente inflamable) con residuos no peligrosos procedentes de industrias papeleras (lodo con celulosa), algo que está completamente prohibido. Con esa mezcla llenaban parte de los camiones que después cubrían con escombros de construcción para camuflarlos y poder transportarlos sin levantar sospechas. Después las depositaban en vertederos de escombros, no autorizados para depositar los vertidos peligrosos.
La denuncia de estas prácticas la hace ASEGRE, la Asociación de Empresas Gestoras de Residuos y Recursos Especiales, que detectó esas prácticas irregulares y que puso un detective para confirmarlas. Luis Palomino, se secretario general, ha explicado cuál era su modo de actuar.
Esos residuos peligrosos llegaban a Chiloeches desde las propias industrias farmacéuticas y desde allí los enviaban a esos vertederos de escombros, aunque ASEGRE no ha podido confirmar los puntos exactos donde los arrojaban.
Saltándose las normas de esta manera, la empresa podía ofertar el trabajo a precios mucho más baratos (hasta 10 veces más baratos), algo que llevaban haciendo al menos desde septiembre de 2015.
Además, según ASEGRE, almacenaban los residuos de forma incorrecta. “A través de fotografías hemos podido ver que tenían residuos peligrosos en el exterior y esos residuos peligrosos deben estar resguardados y protegidos de las inclemencias”, asegura Palomino.
Desde la Asociación aseguran que el problema no es la normativa sobre gestión de residuos, que es igual en toda España, sino los controles que dependen de las diferentes comunidades autónomas y que “facilitan” que algunas empresas puedan saltarse la normativa de una forma “relativamente sencilla”.
En cuanto a la contaminación que ha podido producir el incendio, Palomino es bastante claro. “Las instalaciones están contaminadas seguro. Habrá muchas toneladas de residuos que no se han evaporado y que se han infiltrado en el terreno, así que habrá que retirar todo lo que hay y analizar bien el terreno”.