Patentar es garantía de estímulo a la investigación, primer paso de transferencia del conocimiento científico a la sociedad y nexo entre los mundos académico y empresarial. Las cifras de patentes españolas no se han distinguido nunca por su opulencia, si bien tienden a la mejora, especialmente por su creciente proyección internacional. En este campo brilla la innovación fruto de la química, un área responsable de casi una cuarta parte de todas las solicitudes de registro, con gran presencia de la industria farmacéutica, pero también de la biotecnología, la alimentación, la agricultura, los plásticos o las energías renovables. Numerosos químicos trabajan en el campo de la propiedad industrial, terreno que les ofrece un interesante horizonte para su desarrollo profesional. | Lorena Cabeza / divulga DESCARGAR La Química de la Innovación