El presidente del Consejo General de Economistas, Valentín Pich i Rosell, ha considerado hoy que 'el principal comportamiento ético de las empresas y su primera responsabilidad social corporativa es cumplir con la legalidad' y pagar los impuestos establecidos.

El economista, que ofrece hoy una conferencia en la Universidad Politécnica de Cartagena sobre la importancia de la responsabilidad social corporativa de las empresas, ha explicado en una entrevista con EFE que, en esa materia, hay que dejar de lado los formalismos y las palabras vacías, y dar un verdadero contenido a esos términos.

En su opinión, 'el comportamiento ético de las empresas es un valor económico' en sí mismo, y debe partir del compromiso con la legalidad, si bien ha reconocido que los altos tipo nominales y cuotas a la seguridad social 'no ayudan ni a la creación de empleo ni a la lucha contra la economía sumergida'.

En ese sentido, ha explicado que existe un tipo de economía irregular 'de supervivencia', ya que el coste del factor trabajo en España es 'demasiado alto', no por los salarios de los trabajadores, sino por los 'altos impuestos ligados al factor trabajo'.

'No existen soluciones milagrosas, pero hay un gran problema, similar a quien tiene una adicción y sabe que tiene que curarse de ella, pero no puede hacerlo', ha apuntado.

En ese sentido, ha explicado que el país requiere de los ingresos que proceden del sector empresarial a través de los impuestos y cotizaciones a la seguridad social, pero estos son tan elevados que 'no favorecen la inversión, ni el ahorro, ni la lucha contra el fraude'.

Por otra parte, ha destacado que para salir de la situación de crisis actual 'es necesario crear empresas sostenibles, no solo desde el punto de vista medioambiental, sino también con voluntad de permanecer en el tiempo'.

Para ello, es imprescindible 'retener el talento', consolidar los equipos humanos, algo que se consigue desde una dirección 'responsable y transparente', que deje de lado la filosofía del 'ordeno y mando' y permita la consolidación de los equipos humanos, ha explicado.

Si las empresas no hacen esfuerzos por mejorar su responsabilidad social, contactar con las sensibilidades de los ciudadanos o impulsar la conciliación, entre otras medidas, ha considerado, difícilmente podrá retener el talento, por lo que el comportamiento ético de las empresas 'es una garantía de éxito'.

Por último, ha recomendado a los jóvenes que se están formando en economía y dirección de empresas que tengan una 'actitud muy positiva' a la hora de acceder al mercado laboral, una actitud cooperativa y de colaboración, de 'dar más que de pedir', ya que las empresas dan por sentadas las habilidades de formación y buscan consolidar equipos humanos perdurables.