Mapei, productor destacado a nivel mundial de adhesivos, selladores y productos químicos para la construcción, fue una de las empresas participantes en los Encuentros de Arquitectura que la Fundación Arquitectura y Sociedad celebra bianualmente en Ultzama (Pamplona). Este año, la cita tuvo lugar entre los pasados 29 de junio y 2 de julio.

Fundada en 2008 por el arquitecto Patxi Mangado, la Fundación Arquitectura y Sociedad es una entidad de carácter cultural y privado, sin ánimo de lucro y con proyección pública nacional e internacional. Con sedes permanentes en Pamplona y Madrid, su principal interés es el de promocionar la arquitectura como un ámbito indisolublemente ligado a la vida en sociedad.

En palabras de los responsables de la Fundación, 'la arquitectura, que debe tratar de dar soluciones al complejo entramado social, tiene que interactuar con otras disciplinas de la creación, el pensamiento o la economía'. Una visión holística que hace especial hincapié en el trabajo colaborativo del arquitecto, que debe encargarse de tender puentes con los demás actores que intervienen en la cadena de valor dentro del sector. Así lo suscribía en una reciente entrevista el propio Mangado: 'Todo lo que yo hago se lo debo a mis colaboradores, a los ingenieros con los que trabajo, a los arquitectos que están en la Administración apoyando y facilitando los trámites, a los políticos que toman decisiones a favor de la sociedad... A tantísima gente, que no se puede hablar de arquitectura de autor, la arquitectura de hoy es grupal'.

Humanizar la ciudad

Es bajo ese prisma en el que la Fundación organiza cada dos años un Congreso Internacional de Arquitectura. Desde 2010, que se celebrara la primera edición, esa cita ha acogido a primeras figuras de la escena arquitectónica como son Renzo Piano, Jacques Herzog y Glenn Murcutt, en 2010; Norman Foster, Rafael Moneo y Souto de Mora, en 2012; Dominique Perrault y Alvaro Siza, en 2014, y Rem Koolhaas, Pierre de Meuron, Bjarke Ingels, Dietmar Eberle y Winy Maas, en 2016.

Fiel a ese mismo enfoque de la arquitectura, la entidad también lleva a cabo workshops, debates, mesas redondas, conferencias y numerosos artículos técnicos, además de organizar bianualmente –e intercalándose con el Congreso Internacional de Arquitectura- el Campus Internacional de Ultzama, unos encuentros de arquitectura que este año se han celebrado bajo el lema “Humanizar la ciudad” y que han contado con Mapei ya no solo como patrocinador, sino como empresa puntera del sector que ha querido aportar valor a través de su experiencia y know-how tras 80 años de trayectoria en el mercado global, 26 de ellos también en España.

Explorar sinergias

Los encargados de representar a Mapei en los Encuentros de Arquitectura celebrados en el marco del Campus Internacional de Ultzama fueron sus responsables de Asistencia Técnica, Gabriel Ortín y Joan Lleal; su responsable de Negocio y Materiales de Construcción, Joaquim Cantacorps, y su respondable de Productos resistentes al agua, Xavier Campoy. Todos ellos tuvieron la posibilidad de interactuar durante tres jornadas con un grupo de prestigiosos arquitectos venidos de todo el mundo y destacan como valor añadido 'las sinergias y puentes establecidos con todos ellos, además de la posibilidad de dar a conocer los proyectos que Mapei se encuentra desarrollando actualmente'.

Una cita que también sirvió para que los allí presentes conocieran de primera mano los valores que diferencian a Mapei como partner y las soluciones y productos que la firma pone al alcance de sus múltiples y diversos colaboradores.

Cabe destacar, asimismo, que el selecto grupo de estudiantes de Arquitectura que acudieron a la cita participaron en los dos workshops que se celebraron en el marco del Campus y que tuvieron lugar entre los días 3 y 16 de julio. Uno de ellos estuvo capitaneado por Patxi Mangado, Carlos Pereda e Ignacio Olite, mientras que el segundo se desarrolló bajo la dirección de Eduardo Souto de Moura, Camilo Rebelo y Joâo Pedro Serodio. Durante el transcurso de los workshops, los dos grupos tuvieron que desarrollar dos proyectos reales de vivienda social, uno de naturaleza urbana y el otro rural.