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ACCIDENTES

Bomberos de Alicante neutralizan 3.000 litros de gasolina en un simulacro de accidente

diarioinformacion.com []

 

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El SPEIS ha simulado una colisión en una gasolinera entre un camión cisterna que se encontraba descargando el combustible y una camioneta que transportaba una tubería

Los bomberos del Servicio de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamentos (SPEIS) del Ayuntamiento de Alicante han neutralizado hoy un derrame de 3.000 litros de gasolina en un simulacro de accidente organizado en una estación de servicio de Cepsa.

En ese emplazamiento se ha simulado una colisión entre un cisterna que se encontraba descargando el combustible y una camioneta que transportaba una tubería, ha informado la Concejalía de Seguridad.

Como consecuencia del impacto, la tubería perfora la cisterna, que vierte un derrame de 3.000 litros de gasolina.

En una situación real, según la Concejalía, se tendrían que activar el Plan Especial frente al riesgo de accidentes en el transporte de mercancías peligrosas por carretera y el Territorial de Emergencias del municipio de Alicante.

Además, debería montarse un Puesto de Mando Avanzado (PMA) del Speis, donde tendrían que estar presentes los coordinadores de todas las unidades de intervención de los cuerpos de seguridad, seguridad sanitaria y logística para tomar las decisiones en comunicación con el Centro de Coordinación Municipal (Cecopal).

El edil de Seguridad, José Ramón González, ha explicado que los cuerpos de seguridad del consistorio de la capital alicantina han organizado este simulacro para afrontar una situación de 'emergencia extrema' que se podría dar en tiempo real.

Su finalidad ha sido 'verificar la coordinación, los tiempos de respuesta, cómo tendrían que trabajar los bomberos ante esta situación y mejorar su eficacia de respuesta', ha indicado González.

El simulacro ha comenzado a las 10.30 horas en la estación de servicio de Cepsa situada en la carretera de Ocaña.

En una primera intervención, el conductor de la cisterna afectada del derrame, según su Plan, llama al 112 para advertir de lo ocurrido, aportando los datos de la situación para alertar a los diferentes servicios de emergencia.

El responsable de la gasolinera desconecta la corriente y evacúa la estación, mientras que el conductor de la cisterna intenta taponar el imbornal para que la gasolina no se vierta.

Los primeros servicios de emergencia que llegan al lugar son los policías locales, que mantienen una primera conversación con el transportista y el responsable de la estación de servicio.

Además, cortan todos los accesos a la gasolinera, comprueban que no hay nadie en el interior, desalojan las naves cercanas e informan de la situación a sus mandos, al tiempo que se habilita un perímetro de seguridad para que no acceda nadie a la zona afectada.

Igualmente, se sitúa un PMA para coordinar la emergencia y poder actuar con celeridad en la toma de decisiones.

Según fuentes del Speis, de inmediato se desplazan cuatro dotaciones, con veinticuatro efectivos de bomberos.

En una primera toma de contacto, el mando de bomberos habla con el transportista y la Policía, y adquiere toda la documentación de la cisterna para actuar con celeridad.

Los bomberos se dividen en varios equipos y se monta también un puesto de descontaminación.

El primer equipo se ocupa de neutralizar el derrame y evitar que se propague por el imbornal. Para neutralizarlo, utilizan un gel que, al dilatarse, tapona el imbornal y evita, así, el peligro que supondría que el derrame se extendiera por el alcantarillado.

Paralelamente, un segundo equipo trabaja para neutralizar el charco del derrame y crear una barrera protectora con sacos de arena para contener la gasolina extendida por la estación de servicio, mientras que otro supervisa que no haya nadie en el interior y ningún vehículo cercano encendido.

La zona caliente tiene un gran peligro: emana vapores de gasolina que, en contacto con cualquier chispa o zona de calor, como un vehículo encendido, podría ocasionar una explosión.

Ante esta situación extrema, un cuarto equipo de bomberos se encarga de cubrir el derrame con espuma, haciendo el charco más ligero y logrando que la gasolina deje de emanar vapores.

Durante estas labores de neutralizar el charco, los bomberos preventivamente se protegen con compañeros y una lanza de agua por si hubiera una explosión.

Asimismo, otro equipo se centra en la cisterna para impedir que siga derramando gasolina, protegido también por una lanza de agua, y se habilita un recipiente grande donde va a caer el chorro del derrame mientras se tapona el agujero con cuñas neumáticas.

Una vez finalizada esta fase de la emergencia, se trasvasa la gasolina del interior a otra cisterna suministrada por la propia empresa transportista.

Todos los bomberos que actúan en Nivel 2 en el dispositivo de seguridad y han estado en contacto con el derrame deben ir, una vez terminadas las tareas de intervención en la zona 0, al área de descontaminación habilitada con duchas para cambiarse.


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